Por eso cuando te has decidido a emprender es importante que mantengas la mente abierta sobre el tipo de producto/servicio que pretendes comercializar. Para ello es conveniente que realices un análisis de producto.
Como en ocasiones anteriores he comentado, las bases del marketing online no difieren de las marketing tradicional.
En mis tiempos de asesor de emprendedores me encontré con mucho entusiasmo desbocado. Con emprendedores que estaban tan enamorados de su idea de negocio que no lograban ver los pros y contras de esta. Y el resultado, un aterrizaje doloroso a la realidad.
En la actualidad, lo realmente importante no es el producto o servicio en sí, sino las necesidades y preferencias que pretendemos satisfacer a nuestros futuros consumidores con estos. Pero a veces, esta tarea no resulta tan sencilla como parece.
Un buen comienzo es ordenar las ideas. Para ello te propongo esta guía que te será sencilla si has realizado a conciencia la escucha activa.
Sintetiza el concepto de tu producto/servicio
Inicia redactando en un párrafo cual es el principal beneficio que obtiene un consumidor al adquirir tu producto o servicio. Este beneficio debería ser diferente al que podría proporcionar el producto/servicio de la competencia.
Ten en cuenta tus habilidades, competencias destacables, experiencia, qué dota de valor y diferencia a tu propuesta.
Conoce las ventajas y desventajas de tu producto
Haz una lista de todas las ventajas que obtiene el consumidor de tu producto o servicio, así como las desventajas en relación a los otros productos.
Es aquí donde tu actitud debe ser abierta a escuchar lo bueno y malo de tu producto, no te cierres.
Identifica los productos de tu competencia y productos sustitutos
En este paso, se nota la importancia de tener cerca a tu competencia. No te limites a identificar cuáles son esos productos o servicios, indaga sobre el desempeño aparente entre sus consumidores, lo que dicen los consumidores sobre ellos.
Las redes sociales te pueden dar una idea. También, debes tener en cuenta aquellos productos que puedan sustituir al tuyo cuando este no se encuentra disponible.
En qué etapa del ciclo de vida se encuentra tu producto
Siempre es útil, saber en qué etapa del ciclo de vida se encuentra tu producto. Esta es una herramienta que analiza el estado de la innovación realizada en el producto/servicio en cuestión y se ve reflejado en algunos elementos cómo las ventas, las relaciones con los clientes, el tipo de competencia, entre otros.
Pregúntate:
- ¿Es mi producto innovador?
- ¿Existía antes en el mercado?
- ¿Existen muchos competidores?
- ¿Es un producto ya consolidado? ¿O no da más de sí?
Estas son sólo algunas preguntas que te indican en qué etapa se encuentra tu producto/servicio.
¿Tu producto es susceptible de innovar?
Ya que has analizado en qué etapa se encuentra tu producto/servicio y conoces a tu competencia (nuevos o no), puedes identificar a aquellos que estén en condiciones de introducir alguna innovación al producto y produzca de esta manera un cambio de las reglas del juego.
¿Qué te ha parecido esta guía? ¿Qué le agregarías? Anímate, comenta y participa.